¿Te has propuesto obtener una beca Erasmus?, ¿estás dispuesto a emprender esta aventura, pero no tienes ni la más remota idea de lo que te espera? No te preocupes, a continuación, descubrirás unos cuantos consejos que harán tu estancia más fácil en un país desconocido.
1. Elige bien tu destino:
Son 31 los países que están inscritos en el programa de becas Erasmus. Algunos de ellos no pertenecen a la Unión Europea, como Turquía o Suiza. Ante esta gran oferta de destinos, debes tener en cuenta tus gustos y preferencias. Si sufres con el frío, Islandia o los países escandinavos quizás no sean una buena opción. Si no tienes facilidad para los idiomas, en los países de raíz eslava, como Estonia, Polonia o Letonia, quizás encuentres más dificultades para adaptarte. Pero este inconveniente no es un gran problema, pues las becas Erasmus ponen a tu disposición toda la ayuda que necesites.
2. Es bueno que sepas inglés pero puede no ser suficiente
Saber defenderte en inglés puede ayudarte en muchos países, pero no has de olvidar que todavía hay mucha gente que desconoce este idioma. Aprender unas nociones del idioma oficial del país al que vas a viajar te puede servir para desenvolverte con mayor facilidad. Apunta en una libreta palabras clave como: “gracias”, “por favor”, “¿cuánto cuesta?”, “¿a qué distancia?”, etc. O, si lo prefieres, también puedes comprarte un diccionario de bolsillo o utilizar alguna aplicación en tu smartphone.
3. Hazte con una SIM local
Y, hablando de teléfonos, llevarte tu terminal con una tarifa contratada desde tu país puede salirte por una buena cifra. Para evitar que te dejes tus ahorros en contactar con los tuyos desde el extranjero, lo mejor es que te compres una tarjeta SIM de prepago de alguna compañía local.
4. Viaja todo lo que puedas
No todos los días se tiene la oportunidad de vivir en un país extranjero. Por ello, lo mejor que puedes hacer es recorrértelo de punta a punta. Pregunta qué opción te aconsejan para desplazarte y organiza viajes con tus compañeros y amigos. Te aseguramos una experiencia emocionante.
5. Mézclate con los locales
Lo mejor para empaparse de la gastronomía, la cultura y los paisajes de un país es conocer a las gentes que lo habitan. Hay estudiantes de Erasmus a los que les cuesta relacionarse con gente de otros países. Si eres uno de ellos, prueba a quitarte la vergüenza apuntándote a actividades de intercambio con estudiantes locales. Si practicas alguna actividad o deporte, ya tienes algo que compartir con los demás sin necesidad de echar mano al diccionario.
6. Aprende y emprende
No pienses en que estás solo en el extranjero como si fuera un inconveniente. Al contrario. Tienes una oportunidad maravillosa para aprender, no sólo un idioma y una cultura, sino todo lo que te propongas.
7. Haz contactos
No hay nada mejor que un viaje Erasmus para hacer amigos y futuros contactos profesionales. No te cierres a conocer gente, aunque pienses que puedan ser muy distintos a ti. Saca partido al máximo de esta aventura. Tendrás momentos buenos y malos, pero cuanta más gente conozcas, más llevadero te será.
8. Busca una universidad que se adecúe a tus necesidades
No te precipites a la hora de escoger universidad. Busca una que se adapte a la carrera que estás estudiando. Acuérdate, también de mirar qué asignaturas ofrecen y escoge las que más te gusten o te puedan ayudar en tu carrera. Infórmate bien de las características de cada una de ellas y ten en cuenta factores como el alojamiento, del que hablaremos en el siguiente punto.
9. Encontrar casa no tiene por qué ser un quebradero de cabeza
Ya hemos llegado a nuestro país de acogida y hemos conocido la universidad en la que vamos a estudiar. Ahora llega la gran pregunta: ¿Dónde dormimos? Pues bien, la mayoría de las universidades disponen de residencias o colegios mayores para estudiantes. Si esta opción no te convence, puedes consultar en el departamento de atención al alumno o, incluso, en la cafetería de la propia universidad. En estos sitios suele haber anuncios de gente ofertando pisos de alquiler o de otros estudiantes que buscan compañeros.
10. ¡Disfruta!
Un viaje Erasmus es una de esas cosas que sólo pasan una vez en la vida. Una etapa irrepetible que debes aprovechar al máximo. Sal de fiesta con tus amigos, haz viajes a los países limítrofes, saca fotos, graba vídeos, conoce toda la gente que puedas y, sobre todo, intenta ser feliz. Si eres capaz de seguir estas sencillas pautas, tu estancia en un país extranjero se puede convertir en un recuerdo imborrable.