La figura del emprendedor se basa en una idea, una brillante idea que se sale de la norma y que merece el esfuerzo de ser llevada a cabo en forma de proyecto. Esto implica noches sin dormir, mucha incertidumbre y, sobretodo, un riesgo. Porque nadie está cien por cien seguro de que su idea pueda funcionar y tenga una viabilidad real.Un país de emprendedores
Desde que empezara la ya famosa crisis económica y la sociedad conociera sus estragos, España es un país donde la figura del emprendedor cada vez es más común entre los hombres y mujeres en edad de trabajar. Con ello, el mercado de seguros no se ha quedado atrás y ofrece una amplia gama de seguros orientados a acompañar y a dar soporte a estos emprendedores en su nueva etapa profesional.
En este mercado de seguros se pueden fácilmente identificar dos perfiles distintos de emprendedor: aquél que suscribe un seguro porque un cliente lo precisa, o aquél que analiza su situación de riesgo y prefiere ser previsor ante la incertidumbre, teniendo la certeza de que estará cubierto ante cualquier imprevisto en el campo profesional.
Si nos centramos en el primer grupo, no solo las grandes corporaciones esperan que sus contratistas y proveedores estén bien cubiertos, normalmente con seguros de RC y RC Profesional. Las pymes e incluso autónomos también pueden exigirlo. Por ello, un buen consejo es observar el tipo de industria y las coberturas que se exigen dada la naturaleza de la actividad laboral.
¿Qué tipo de seguros debe contratar un emprendedor?
Cada emprendedor es único y por ello, sus necesidades también lo son. La contratación de una póliza depende de su actividad, el volumen de facturación, el tipo de activos que dispone, dónde trabaja, etc.
Aun así, los imprescindibles son:
- Responsabilidad civil Profesional por el ejercicio de la actividad.
- Responsabilidad civil por daños a terceros.
- Cobertura por daños a inmuebles, como la oficina, el almacén o la tienda.
- La cobertura por baja laboral que paraliza total o parcialmente el ejercicio de la actividad.
- Seguros de vida-riesgo que permite cubrir el riesgo de invalidez o fallecimiento, compensando la pérdida de ingresos y cubrir las necesidades familiares, o vida-ahorro, que permite complementar la jubilación.
- Seguros muy especializados como los riesgos asociados a las nuevas tecnologías, los riesgos relacionados con la internacionalización, los riesgos relacionados con construcción o instalaciones o los riesgos asociados con la protección de pagos.
3 consejos a tener en cuenta antes de contratar un seguro
- Ponerte en la peor situación: Es cierto que la probabilidad que pase algo malo es baja, pero merece la pena ponerse en la peor situación posible y valorar los riesgos. De este modo podemos analizar si realmente podemos enfrentarnos nosotros solos o vale la pena estar bien cubierto.
- No escatimar con el precio: Vale la pena obtener un rango de cotizaciones para ver qué coberturas adicionales tiene cada una y valorar cual te puedes permitir y además, cubre tus necesidades.
- Si el contrato es más importante, también lo es la responsabilidad: Los clientes te exigirán más responsabilidad en función de tu contrato. Eso significa que si algo sale mal, más probabilidades hay de recibir una demanda. ¿La solución? Contratar una buena póliza de responsabilidad civil.
La figura del emprendedor tiene mucho peso en la economía del país y por ello, las aseguradoras están apostando por la innovación para ofrecer un amplio abanico de novedades en coberturas. Si quieres descubrir algunas, nuestro equipo de profesionales de La Mutua de los Ingenieros podrá asesorarte para que tengas las mejores coberturas que necesitas según tu actividad profesional.