Desde el curso pasado, en el marco del convenio de colaboración que tienen firmado la Mutua de los Ingenieros y la Universidad de Vic – Universidad Central de Cataluña, y con el fin de promover la movilidad internacional entre los estudiantes del ámbito de ingeniería, la Mutua de Ingenieros concede dos becas especiales de 1000 euros cada una, para dos estudiantes de la UVic-UCC que quieran complementar su formación de grado con una estancia en el exterior, sea de prácticas o bien de estudio.
Hoy ha tenido lugar en la Sala de Juntas del Rectorado el acto de entrega de las dos becas a los estudiantes de ingeniería que el próximo curso harán una estancia en el extranjero: Albert Rovira, que hará una estancia de estudios en Hames Ammattikorkeakoulu en Finlandia y Alba María Herrera, que hará las prácticas en el Institute for Basic Science de Corera del Sur.
Al acto también han asistido los estudiantes que el curso pasado ya obtuvieron la beca: Laura Martinez Casas, que ha realizado una estancia de estudios en la Tampereen Ammattikorkeakoulu (Tamka) de Finlandia, y Eva Sitjà Prat, que ha hecho prácticas en la empresa ITQ GmbH de Alemania. Ambas estudiantes han agradecido la beca y han afirmado que han vuelto con trabajo.
El acto ha contado con la presencia del rector de la UVic-UCC, Jordi Montaña; el presidente de La Mutua de Ingenieros, Joan Munt; el vicerrector de Relaciones Internacionales, Joan Masnou, y la decana de la facultad de Ciencias y Tecnología, Laura Dempere.
Jordi Montaña ha agradecido a la Mutua de los Ingenieros la tarea «de ayudar a nuestros estudiantes de ingeniería a internacionalizarse», al tiempo que ha animado a otras empresas e instituciones a seguir su ejemplo. También hizo notar que tres de los cuatro becados son mujeres «y eso nos enorgullece, teniendo en cuenta que hay pocas mujeres que estudien ingeniería».
Por su parte, el presidente de la Mutua de Ingenieros, Joan Munt, explicó «que en un mundo cada vez más globalizado, estas ayudas a la movilidad internacional son un reconocimiento a los estudiantes con talento y también compensan el esfuerzo que hacen las familias que envían a sus hijos a estudiar fuera «.
Laura Dempere pidió a las estudiantes que obtuvieron la beca el curso pasado «que hagan balance de la experiencia y animen a sus compañeros a marchar fuera». Por último, Joan Masnou ha manifestado que «nuestra voluntad es que todos los estudiantes puedan irse fuera», y añadió que «ojalá hubiera más instituciones que, como la Mutua de los Ingenieros, apostaran para favorecer la internacionalización de los estudiantes «.
El requisito para acceder a estas becas es haber superado el primer curso de una ingeniería en la UVic-UCC y haber sido seleccionado para hacer movilidad en una universidad extranjera con la cual la Universidad tenga convenio, o en una empresa para realizar prácticas. La comisión evaluadora, formada por miembros de la Mutua y de la UVic, asigna las becas en función del expediente académico, la motivación que demuestre el estudiante, y la acreditación del nivel B2 de una tercera lengua.
La Mutua de los Ingenieros nació en 1958 como un instrumento del Colegio de Ingenieros Industriales de Cataluña para poder cumplir uno de sus mandatos estatutarios, «organizar y desarrollar la previsión social entre los colegiados», en un momento en que la seguridad Social no daba cobertura a los titulados superiores de ingeniería industrial. Desde el curso pasado, y de forma anual, otorga dos becas de movilidad a estudiantes de la UVic-UCC para que salgan a estudiar en el extranjero.